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La Ciudad de México es enorme y rica, en cuanto a posibilidades de espacios y rincones para poder hacer fotografías. Y volver a trabajar con Lizett es una gran experiencia por su talento, por sus aportes, por sus ideas y todos los vestuarios que lleva para poder hacer una enorme sesión de fotos.
En esta serie trabaje con un flash AD200 y un octabox de 70 cm para poder iluminar. ¿Fue la mejor elección? Es una flash que se defiende y resuelve, pero trabajar a pleno sol en muchas ocaciones es llevarlo a su. límite. Muchas veces hay que llevarlo a toda potencia y con el calor del día se llega a calentar y eso detiene un poco la sesión. Pero lo lleve por lo práctico y ligero, que es algo que necesitaba para esta ocasión.
Y más allá de la iluminación, la magia estuvo en Liz. En todo sus aportes, vestuarios y encanto. Cuándo los escenarios juegan a tu favor vas a dedicarle 2 a 3 horas recorriendo no más de 5 calles aprovechando cada rincón. La clave es tener el ojo de saber que espacio funciona y crear en el.
Se trata de salir a buscar y encontrar espacios, crear y estar activos. Tomen su cámara y salgan a hacer fotografías. Nos vemos la próxima. gracias por leer, mirar y compartir.
