Tiempos de Censura

Saludos, hoy le comparto algo un poco diferente a lo que normalmente realizo. Una sesión distinta de mi trabajo que me da varios puntos de análisis para poder compartir con ustedes. Una sesión boudoir, que afortunadamente ha gustado mucho, tuvo una gran aceptación en mis redes sociales, me hicieron muy buenos comentarios sobre la misma, pero curiosamente también me trajo unos días de «castigo» por parte de Facebook.

Primero, retratar el cuerpo humano no es fácil. Puede tener muchas complejidades, demasiados matices, demasiadas lecturas. Es  una linea muy delgada entre el buen gusto, lo estético y la belleza. El punto es que todos estos términos son tan amplios y ambiguos, la belleza es diferente para una persona que para otra. creo que pocas cosas en el universo pueden considerarse bellezas universales. Y es ésta misma ambigüedad lo que me llevo a la censura por parte de Facebook.

Ésta es la fotografía que da origen a ésta entrada en el blog y al título de la misma. ¿Qué les parece?

Existen varias razones por las que son muy raras y esporádicas por las que yo casi no hago éste tipo de fotografías. Admiro y me gusta el cuerpo humano, sin dudarlo, en todas sus versiones. Pero de toda la belleza que existe en el mundo, el cuerpo humano no creo que ocupe más del 5% de esa belleza, el mundo es mucho más grande como para detenerme únicamente en el cuerpo humano.

Por alguna razón muchos fotógrafos se enfocan en el cuerpo humano, específicamente en retratar mujeres. Un gran porcentaje de fotógrafos, sobre todo los que inician se enfocan en éste tipo de fotografías. Lo que lo convierte en un tipo de fotografía demasiado saturado, vuelvo a lo mismo, el mundo es mucho más grande. En un mercado muy saturado, por lo que busco hacer cosas más pegadas a mi estilo, para tratar de marcar una diferencia, o por lo menos algo que la gente pueda identificar con mi toque fotográfico, mi tipo de edición o con la iluminación que me gusta.

La mayor parte de mis fotografías de éste estilo están llenas de sombras y unas pinceladas de luz. Es muy difícil mostrar el cuerpo humano, sin que sea ofensivo, sin que sea agresivo y que a la gente les agrade mis fotografías. Lograr una fotografía que diga mucho, sin mostrar nada es todo un reto. Un parámetro que creo interesante para evaluar ésta serie, es la opinión de las mujeres. La mayor aceptación de las fotografías en mis redes sociales y la mayor parte de los comentarios, estamos hablando del 70% de las reacciones, fueron realizados por mujeres. Creo que es una buena señal.

La preparación y la visión siguen siendo fundamentales en mis fotografías. Llevo lustros, décadas estudiando fotografía, practicando fotografía y enseñando fotografía, como para encasillarme en un tipo de imágenes, ojo que no se confunda con la especialización, que es fundamental y necesaria en estos tiempos. Pero cada tipo de fotografías que realizo las hago desde mi experiencia, desde lo que siento y desde lo que veo. Me he capacitado tanto como para creer que existe una formula mágica para que todas las fotografías. Volviendo al tema del boudoir, cada cuerpo es diferente, no puedo iluminar todos los cuerpos de la misma manera, cada luz y cada sombra se ven diferentes de un cuerpo a otro, de una textura a otra. No hay formulas mágicas y no me interesa hacer las mismas fotografías que hacen los demás o las que están de moda. Es mi visión, puedo gustar o no gustar que es parte esencial de lo que escribo el día de hoy, y es totalmente válido. Apostemos por ampliar las miradas y los sentidos cuando hacemos fotografías-

Gracias por leer y compartir. ¿Cuál es su opinión de la serie?

Tiempos